Están aquí las palabras con las que me vestiste, semejantes al alba de los días, dispuestas en la espesura del hombre, palpables en la sombra de tu marcha.
Están aquí la niña y el nicho, el jueves, que no me deja sitio, el forcejeo de la herrumbre en los labios, la petición en balde de ver el cielo: burocracia de devocionario.
Están aquí el freno del aire, fingiéndose añil y residente por horas, la mirada recopilada en renglones, presentando sus excusas por claridad indispuesta, panorámica de la náusea.
Están aquí la voluntad del silencio y su conciencia de clase hambrienta, el cansancio de la habitación de al lado y su pensamiento arrastrado desde la ausencia sentada a la mesa hasta el surco del gesto imposible.
Y en esta reunión emplazada en mis 21, que me desenseña la mañana siguiente y la ingenuidad de la sangre a medio hacer, escribo igual que amanezco: contra la contingencia de perder imagen y semejanza, de vivir a traición.
escribes como amaneces, una caligrafía orbital...dice que la entraña esta medio hecha por estar Viva como esa sangre, que se cuela en la mirada, y sé decir que ya no me afecta...aunque nunca esperas ver como se desangra un amigo mientras tu gritas. En esta escritura Amanecida quiero salir de la cueva para ver su elipse celeste, que me ayude a buscar huellas de Animal comestible...volver luego al margen de mi vida,para calmarme allí, leyéndote. Dos mil ocho, que buena cosecha Tuya. besos volados.
Efectivamente, te vistieron con las más bellas palabras, escritas igual que amaneces. Y eres el resultado de la suma de lo que fue. Y, te enfrentas, sabiendo quién eres, a lo que queda por venir. Un beso grande, Raquel.
Llevar en el corazón las palabras, gestos y miradas. Guardar en un recuerdo los olores, abrazos y silencios. No se pierde Raquel, se incorpora en nuestra sangre, que nunca acabará de hacerse. Aunque duela la ausencia del tacto o el sonido de la respiración, es parte de algo intangible, que no se puede tocar y que con sólo nombrar, a veces parece traición por la corrupción del vocablo, aunque no me da vergüenza escribirlo en mayúsculas: AMOR (como también me inspiran ausencias lloradas y anhelos del que no pudo ser). Abrazos presentes y cercanos
Y tú llevas esa vestimenta como nadie, con ella te elevas en vuelos de Domingos, describes la esencia de los mares como un buzo exacto en su memoria, penetras en instantes cotidianos y ordenas magistralmente los múltiples y líricos contrastes, dibujas con palabras lo que para muchos es inimaginable y así nos permites disfrutar, paseando por tus versos, de espacios admirables.
Tus palabras te dan identidad propia, sin perder imagen y semejanza de tus raíces, constatando tu fidelidad al recuerdo de quienes ya no están y que por culpa de esa "burocracia de devocionario" que dices no podemos ver. "Ausencias sentadas a la mesa" que nos resultan difíciles de situar en este presente de añoranzas. Pero tú Raquel, con tus palabras, has situado en tu poema todo en su sitio de forma exacta; emotivamente exacta.
Como siempre Raquel, tu poesía es sublime, y consigue que mi mente abandone el vértigo de la rutina para disfrutar de tus palabras. Tus versos son una puerta de entrada a un mundo de consciencia elevada.
15 comentarios:
escribes como amaneces, una caligrafía orbital...dice que la entraña esta medio hecha por estar Viva como esa sangre, que se cuela en la mirada, y sé decir que ya no me afecta...aunque nunca esperas ver como se desangra un amigo mientras tu gritas.
En esta escritura Amanecida quiero
salir de la cueva para ver su elipse celeste, que me ayude a buscar huellas de Animal comestible...volver luego al margen de mi vida,para calmarme allí, leyéndote.
Dos mil ocho, que buena cosecha Tuya.
besos volados.
Si te vistieron con las palabras con las que nos has engalonado el día de hoy, he de decir que nunca antes te había visto tan bella, Raquel...
Besos!
Está todo lo que eres.
La suma de todo lo que pasó.
El resultado con el que amaneces.
Para seguir sumando.
Besos.
El resumen de un alma bella, llena de palabras que hacen disfrutar la mirada, de sonidos que calman.
Escribes muy bien.
Un beso cielo.
Efectivamente, te vistieron con las más bellas palabras, escritas igual que amaneces. Y eres el resultado de la suma de lo que fue. Y, te enfrentas, sabiendo quién eres, a lo que queda por venir.
Un beso grande, Raquel.
Llevar en el corazón las palabras, gestos y miradas. Guardar en un recuerdo los olores, abrazos y silencios.
No se pierde Raquel, se incorpora en nuestra sangre, que nunca acabará de hacerse. Aunque duela la ausencia del tacto o el sonido de la respiración, es parte de algo intangible, que no se puede tocar y que con sólo nombrar, a veces parece traición por la corrupción del vocablo, aunque no me da vergüenza escribirlo en mayúsculas: AMOR (como también me inspiran ausencias lloradas y anhelos del que no pudo ser).
Abrazos presentes y cercanos
Muy grata la visita a tu blog.
Agradezco la tuya al mío, así como tus amables frases.
Saludos
la niña
y el nicho
y en los intervalos
los mapas
las contingencias
los surcos
y unos renglones
que observan
con la sabiduría
que no se aprende
maravilloso
un beso
Y tú llevas esa vestimenta como nadie, con ella te elevas en vuelos de Domingos, describes la esencia de los mares como un buzo exacto en su memoria, penetras en instantes cotidianos y ordenas magistralmente los múltiples y líricos contrastes, dibujas con palabras lo que para muchos es inimaginable y así nos permites disfrutar, paseando por tus versos, de espacios admirables.
Tus palabras te dan identidad propia, sin perder imagen y semejanza de tus raíces, constatando tu fidelidad al recuerdo de quienes ya no están y que por culpa de esa "burocracia de devocionario" que dices no podemos ver. "Ausencias sentadas a la mesa" que nos resultan difíciles de situar en este presente de añoranzas. Pero tú Raquel, con tus palabras, has situado en tu poema todo en su sitio de forma exacta; emotivamente exacta.
Como siempre Raquel, tu poesía es sublime, y consigue que mi mente abandone el vértigo de la rutina para disfrutar de tus palabras. Tus versos son una puerta de entrada a un mundo de consciencia elevada.
Besos.
Yo también estoy aquí!
Quizás sean así los mejores versos dedicados: un presentar del fruto originado por la semilla que aceptamos de aquellos a quienes se lo devolvemos.
Besos.
Yo también me acerqué a conocerte...
volveré porque me ha gustado el paseo.
Un beso
...las palabras son una selva de vida dan de ti lo que tu les das a ellas con cariño desde mi alma a la tuya siempre ...jose ramon.
"Están aquí la voluntad del silencio
y su conciencia de clase hambrienta,"
Entre otras cosas porque los harapos siempre intentan pegar bocaos, hasta saciarse, y romperse el alma a cachos...
Saludos!
Qué maravilla, un gigantesco poema ebrio de imágenes perfectas. Me encantó tu blog y te sigo. Brillantes tus trabajos. Felicitaciones!!
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